VIAJES A CIELO ABIERTO A TRAVÉS DE MÚSICA Y LETRAS

La Muestra Praça de esta edición del CineBH está casi enteramente dedicada a la música, ya sea a través de documentales que perfilan grupos y sonoridades, o mediante la ficción cuyo punto de partida es una tienda de discos de vinilo y en la cual el ritmo narrativo es marcado por la musicalidad. En un ambiente al aire libre, rodeado de árboles, transeúntes, viento y todo lo que forma el paisaje urbano, ver estas películas será algo cercano a participar en grandes conciertos, aquí intermediados por el lenguaje del cine para guiar las atenciones y sensibilidades.

El primer título es de la casa: Nada Será como Antes – A Música do Clube da Esquina, de Ana Rieper, y su título adelanta de qué se trata. El documental se sumerge en el contexto que dio origen a uno de los movimientos y grupos de mayor expresión artística de los años 70, aún reverenciado hasta hoy. Nacido de los encuentros de jóvenes músicos en la esquina de las calles Divinópolis y Paraisópolis, en el barrio Santa Tereza de Belo Horizonte, el Clube da Esquina fue llamado el “Beatles brasileño” y, desde su primer álbum, ha aparecido en listas de grandes nombres de la música. El filme de Rieper explora cómo cada miembro recuerda y repensa hoy sus propias presencias e interacciones dentro de aquel colectivo, que contó con figuras como Milton Nascimento, Lô Borges, Beto Guedes, Wagner Tiso, Márcio Borges y Toninho Horta. Imágenes de archivo, recuerdos y anécdotas típicamente mineiras componen un cuadro fascinante de efervescencia cultural, incluyendo la investigación de influencias que moldearon el sonido del Clube da Esquina, como el jazz, la bossa nova, el rock británico y el cancionero folclórico de Minas.

En el caso de Luiz Melodia – No Coração do Brasil, la directora Alessandra Dorgan hace un recorrido por la trayectoria del músico carioca desde sus características de innovador y contestador y sus cuestionamientos, especialmente respecto al funcionamiento de la industria y las discográficas. El filme se enfoca en la percepción de que Melodia fue ignorado u omitido de mayores presencias públicas debido a sus posturas, lo que afectó su brillante carrera, aunque no en términos creativos. Todo es narrado por la voz e imágenes del propio Luiz Melodia, quien “narra” todo el filme y es el único interlocutor con el público, a partir de registros sonoros de sus testimonios e entrevistas. Así, se ofrece una visión subjetiva del artista, desde su infancia en el Morro do Estácio, en Río de Janeiro, hasta el reconocimiento nacional e internacional gracias a la mezcla única de samba, soul, rock y MPB que caracterizó su producción. “Mientras exista música dentro de cada uno, existe libertad”, dice Melodia.

Por su parte, Durval Discos es una ficción de 2002 dirigida por Anna Muylaert, homenajeada en esta edición del CineBH. La decisión de exhibir su primer largometraje en una plaza surgió de la revisión del filme proporcionada por un relanzamiento en 2023, que celebró las más de dos décadas desde su estreno en salas. El impacto de la revisión fue tal que surgió la percepción de que el filme no solo se actualizó y se mostró adelantado a su tiempo, sino que tiene un enorme potencial para una proyección al aire libre, abierta a todos los públicos. Esto se debe a que Muylaert ya se muestra aquí como una directora que dialoga de manera muy directa con los espectadores, capturando su atención de inmediato y sin soltarla. En este caso, la sencilla historia de un hombre de mediana edad algo hippie que vive con su madre y mantiene una tienda de vinilos en el barrio de Pinheiros, en São Paulo, está intercalada con músicas brasileñas que revelan el aspecto pop de la obra de Muylaert. Al igual que los discos de vinilo, la película tiene su lado B, que se revela a la mitad, cuando la trama toma un giro más oscuro, aunque no menos cómico. Es un filme que difícilmente fue pensado para una plaza pública, pero, al igual que las grandes obras del pasado rescatadas al presente, ahora puede y será redescubierto desde esta perspectiva.

Por último, dejando la musicalidad pero manteniéndose en el ámbito lúdico, la animación infantil Teca e Tuti – Uma Noite na Biblioteca será una atracción para todas las edades. Dirigida por Eduardo Perdido, Tiago MAL y Diego M. Doimo, la película sigue las aventuras de Teca, una polilla que tiene como mascota a un ácaro llamado Tuti. Viviendo en una caja de costura, Teca descubre el placer de la lectura y decide proteger los libros de ser devorados. La pareja emprende una jornada por la biblioteca en busca de la historia más importante de sus vidas, que garantice la preservación de los libros como receptores de imaginación y conocimiento. Utilizando técnicas mixtas, desde live action hasta animación tradicional y 3D, la producción es encantadora en su propuesta de aventura y aprendizaje, sin limitarse a discursos meramente didácticos, sino integrando en su narrativa frenética la urgencia de las cuestiones que aborda la trama.

Marcelo Miranda
Curador